A través del juego los niños se construyen como personas, ya que aprenden sobre ellos mismos y sobre los demás. Si pensabas que solo era un pasatiempo, déjanos hablarte de su importancia
El juego constituye un elemento necesario para el desarrollo integral de los niños. A través de él, los pequeños exploran y descubren el mundo por sí mismos. Por lo que, más que una diversión, representa un aprendizaje y una pieza clave en su educación. Además, gracias a él las capacidades del niño se van desarrollando paulatinamente.
Son múltiples los beneficios que se obtienen de jugar y precisamente son en ellos donde radica la importancia de esta práctica: desarrolla la coordinación psicomotriz, la motricidad gruesa y fina, fomenta la creatividad y la imaginación, forma hábitos de cooperación, estimula el desarrollo sensorial, cognitivo y emocional.
También resultan muy estimulantes los juegos de mesa, en los que hay que armar torres o piezas, jugar con cartas o adivinar cosas. Además, las actividades como colorear, bailar y disfrazarse lo ayudarán también en su desarrollo en niveles inimaginables.
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